Os presento ahora al rey del descaro, este tío francés practica un humor que no se puede susurrar, más bien todo lo contrario, su humor funciona a base de gritos, bueno, a gritos, gemidos, saltos, golpes, carreras…
Mis agradecimientos a los chicos de gran-angular por hacerme descubrir el mundo de este peculiar personaje llamado Rémi Gaillard.
Aviso: el exceso de celo puesto por el protagonista de estos vídeos, puede herir la sensibilidad de los internautas más serios de la red.
O sea, que haya tú si los quieres ver.
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